Quise tirar las cosas y atraparte contra la pared, recorrer lentamente tu piel con mis dedos, apreciar la tersura de tu ser con mis labios y disfrutar del aroma de tu cuerpo, sin embargo el epicentro de mi placer resultaría ser tu cuello el cual deseaba morder con paciencia y ternura para disfrutar el estremecer de todo tu cuerpo.
Besar apaciguadamente tu espalda en espera de nuevas sensaciones tuyas, seguir el camino de la verticalidad de tu figura y recorrer tus piernas de manera segura y apretando gentilmente su firmeza, deteniéndome sólo con el contacto de tus calcetines rosas.
Descansar en tu hombro por dos segundos para poder recuperar el aliento y poder continuar embelezándome con tu cuerpo. Mordería tu nuca mientras mis dedos acariciarían el vestido en busca de una oportunidad para retirarlo, recorrerían con veneración el cierre y lo dejarían deslizarse con suavidad hasta llegar al suelo, descubriendo así la totalidad de tu bella desnudez...
Saliste del probador con un vestido morado eléctrico y no pude hacer más que mascullar palabras para decirte lo bien que se te veía.
XRZ