jueves, 16 de septiembre de 2010

Alta traición

No amo mi patria.

Su fulgor abstracto
es inasible.
Pero (aunque suene mal)
daría la vida
por diez lugares suyos,
cierta gente,
puertos, bosques de pinos,
fortalezas,
una ciudad deshecha,
gris, monstruosa,
varias figuras de su historia,
montañas
–y tres o cuatro ríos.


José Emilio Pacheco

viernes, 30 de julio de 2010

280710

Hay cosas que en un primer vistazo resultan abismalmente diferentes, pero no se distancian tanto una vez que se encuentran los detalles. Resulta que existe una similitud casi imperceptible.

Hoy mantenías tu mente difusa, buscabas soluciones a problemas invisibles, buscabas resolver interrogantes introspectivas. Yo, por otra parte , buscaba la sensación revitlizanteque tu presencia logra. Buscaba la euforia de tus ojos, una buena razón para olvidar todo aquello que no sea el calor de tus pupilas. No lo hallé y al parecer en el horizonte no encontraste aquellas anheladas respuestas.

Los aromas, como tu mencionaste, son importantes. Puedo asegurar que una de las memorias que más he desarrollado es la olfativa y es por ello que recuerdo tu aroma con cierta sencillez, puede que se deba en gran medida a la tranquilidad que me brinda. Es irrepetible e irremediablemente seductora.

A pesar de la belleza y misteriosa sensualidad no pude olvidar los tormentos de mi ser. No deje de pensar en todo aquello que en últimas fechas he vivido, tampoco he querido. No pude abandonar ese abatimiento en los vagones naranjas, así que me prense de éste y me encamine a lugares desconocidos.

Es por ello que desde la forntera de la ciudad y la razón envío estas palabras desesperadas de desahogo. A pesar de ello veo con cierto temor que mi sendero sigue más allá de un horizonte.

Ntehni

jueves, 15 de julio de 2010

Queja

Odio dormir a tu lado.
Odio sentir un confort,
sentirme aliviado.

Detesto arruyarme con tus ronrroneos.
detesto cobijarme con tus brazos,
compartir el sueño entrelazados.

Me incomoda el aroma de tu cuello.
Me incomoda la tersura de tu piel,
que me embriaga entre aromas y caricias.

Me fastidia tener que velar tus sueños.
Me fastidia tener que procurarte.
¿Por qué no me atrevo a dejarte?

No quiero dormir contigo más.
No quiero acostumbrarme a ti.
No quiero amanecer extrañándote.
No quiero amanecer buscándote.

lunes, 28 de junio de 2010

Fluido

¿Por que tengo que verte?
No tengo razón alguna para buscarte.
Sin embargo heme aquí frente a tu puerta,
recordando el número de tu apartamento.

¿Por que tengo que extrañarte?
Sólo logramos lastimarte.
Dudo que olvides esas lágrimas que mostraste,
dudo que sepas lo que hiciste.

¿Por que tengo que besarte?
Nunca quisiste quedarte.
Siempre buscabas pretextos,
alguna situación emergente.

¿Por que tengo que amarte?
No pudimos vernos de frente.
Evadíamos aceptar la mentira,
que juntos creíamos.

Sigo sin comprender.
Pregunto sin responder.
Recuerdo sin añorar.
Vivo sin olvidar.

Y hoy veo como te mantienes presente,
veo como escucho lo que dijiste
y aprecio lo que hiciste.
Sin embargo lo hago tarde.
Y no me arrepiento.

Eres un sentimiento,
eres un recuerdo.
Vagamente seré yo eso.
Vagamente me recordarás.
Y no me arrepiento.

sábado, 17 de abril de 2010

Próxima estación Remembranza.

Pasaba aquél monstruo de la ingenería por un tunel oscuro de manera desenfrenada. Pasaban los focos de neon de manera acelerada delante de la ventana. Pasaban las palabras que cuestionaban mi reputación de manera pausada. Entre tu y yo lo más común es la diferenciación y distanciamiento de nuestras personas. Para ejemplificarlo puedo aludir a nuestra percepción del otro, por mi parte tengo una imagen benevolente de ti con ciertas características observadas que derivan en tal conclusión; por tu parte tienes la idea de que soy una persona denesnable y posiblemente tengas más razón que yo en eso.

En busca de convencerte de lo contrario, de que no soy tan "malo" como crees que soy, comence a buscar en las relaciones que mantuve la legitimación de mi bondad, pero lo único que pude hallar son recuerdos y desilusiones que han mellado mi forma de ser. Recordé aquella vez en que ofrecí proteger una vida por siempre (ahora puedo ver los estragos que hace el concepto de amor en los actores y las cláusulas que se deben de cumplir), aquella en que imaginé vivir con ella de manera definitiva, aquella en que dijeron que la melodiosa armonía de un piano jamás cesaría por mi, y aquella en que mi ausencia se hizo evidente y me extrañaron. En fin comenzé a recordar momentos de antaño.

Ciertamente no puedo demostrar o convencerte de que tu percepción de mi sea correcta o no, en todo caso sólo podría abogar por una exageración no muy distanciada de la realidad y tal vez sea por eso que al remebrar sólo hay encontrado bellos momentos pero personas lastimadas. Sin embargo como me defendí en tu presencia, y con esto tal vez pueda redimirme ante los demás, la ayuda en momentos cruciales jamás la he negado a aquellos a quienes me la han solicitado. Posiblemente lo haga por satisfacerme de manera egoísta, también podría ser para crear una imagen pública, o por tener el conocimiento de la sensación de abandono que nos aqueja en momentos de incertidumbre y conflicto y lo necesitados que estamos de algún gesto, acción o palabra de aliento.

No me he detenido a observar la intencionalidad de mis acciones determinadas por una tradición istitucional (la educación) ni la carga valorativa de las mismas. Tendré que pensar en las circunstancias que me han ido determinando y conformado esa imagen que tienes de mi, que ciertemente es una consecuencia no buscada.

Ntehni Ra Zaana

domingo, 4 de abril de 2010

¿Te das cuenta? (Do you realize by The Flaming Lips)

¿Te das cuenta, de que tienes la cara más hermosa?
¿Te das cuenta, de que estamos flotando en el espacio?
¿Te das cuenta, de que la alegría te hace llorar?
¿Te das cuenta, de que todos a los que conoces algún día morirán?

Y en vez de decir adiós, hazles saber
que la vida se va rápido.
Es difícil hacer que las cosas buenas duren
Te das cuenta de que el sol no se oculta
Es sólo la ilusión del mundo que gira.

Te das cuenta, Oh Oh Oh
Te das cuenta, que todos, los que conoces,
Algún día, van a morir.

Y en vez de decir adiós, hazles saber
que la vida se va rápido.
Es difícil hacer que las cosas buenas duren
Te das cuenta de que el sol no se oculta
Es sólo la ilusión del mundo que gira.

¿Te das cuenta, de que tienes la cara más hermosa?
¿Te das cuenta?

lunes, 22 de marzo de 2010

Lost in your space

Me perdí por dos instantes.

El primero fué cuando ví tu rostro emerger de entre un mar de vacío y el segudo cuando reparé en el botón, que en una noche de promesas incumplibles, desabroché para amarte por dos largas vidas, la tuya y la mía.

Después te perdiste de nueva cuenta en el vacío y sólo me dejaste con una sonrisa, vestigio innegable de tu encanto.

Ntehni Ra Zaana

jueves, 18 de febrero de 2010

Permiso para despegar.

Ví como la aeronave emprendía el vuelo.
Ví como mis esperanzas emprendieron el vuelo.
Ví como te apartabas entre nubes de lluvia.
Ví como se apartaronla ilusiones entre la lluvia.

Observé desde el suelo tu partida.
Sufrí desde el suelo tu partida.
Mis ojos siguieron tu rastro hasta que desapareciste.
Mis ojos siguieron tu rastro hasta que se nublaron con lágrimas.

Te abrazé en la estación por última vez.
Te besé en la estación por última vez.
Sonreías y yo no quise impedir que continuaras sonriendo.
Sonreías y yo no quise hacerte saber que estaba sufriendo.

Platicaste de todo lo que querías encontrar del otro lado.
Platicaste de todo lo que querías dejar en este lado.
Te escuchaba con atención.
Te escuchaba con ilusión.

Comenzaste a cantar una canción.
Cantaste por momentos.
Te desentendiste del tiempo.
Entonaste la letra que te dediqué en una canción.

Sonreías.
Me contagiaste de tu alegría.
Sonreías

Llegada la hora tomaste las maletas.
Llegada la hora partiste entre las puertas.
Llegó entonces un triste momento.
Llegó entonces un inaudible llanto.

Querías irte.
Quería tenerte.
Quiciste quedarte.
Quize raptarte.
Querías amarme.

Ví como la aeronave despegaba al cielo.
Ví como mis ilusiones se dirigían a una isla
donde la neblina es reina.

XRZ

martes, 16 de febrero de 2010

Canción No. 2

Cuando estoy a solas
puedo percibir tu aroma.
Cuando estoy a solas
puedo escuchar tu voz.

Desearía ya no estar solo.
Desearía ya no estar solo.
Cuando estoy a solas
puedo sentir tu piel.
Cuando estoy a solas
puedo verte junto a mi.

Desearía ya no estar solo.
Desearía ya no estar solo.

Tu recuerdo se presenta
cuando estoy a solas.
Cuando estoy a solas
El temor me atormenta.

Cuando estoy solo
Percibo tu putrefacto aroma.

Cuando estoy solo
Escucho los bramidos de tu voz.

Cuando estoy solo
siento lo viscoso de tu piel.

Cuando estoy solo
veo tu repulsiva figura junto a mi.

Cuando estoy solo
sufro con tu recuerdo.

El pasado me atormenta
y con tantas memorias
mi cabeza explota,
al evocar lo que hiciste,
al recordar lo que fué.

Revives cuando estoy solo,
me torturan los recuerdos
y grito desesperado:
¡Ya no quiero estar solo!

XRZ

jueves, 11 de febrero de 2010

Canción No.1

Por la noche caminaba,
sin ganas de estar aquí mañana.
Por la noche caminaba,
buscando el refugio de una cama.

Caminaba.
Caminaba por las calles
abandonadas.

Caminaba.
Caminaba por las calles
desenfrenadas.

Y creo que ahora
ya no queda nada,
que valga la pena observar.

Y creo que ahora
ya no queda nada,
que valga la pena ocultar.

La lluvia comienza a caer,
comienza a caer.
Me moja los pies,
me moja el alma.
Ya no sé que más puedo hacer.

Tengo que continuar,
tengo que caminar.
Encontrar una cama
para poder descansar
(donde pueda descansar).

Caminaba.
Caminaba por las calles
observadas.

Caminaba.
Caminaba por las calles
olvidadas.

Y creo que ahora
ya no queda nada
(ya no queda nada)
que valga la pena abandonar.

XRZ

miércoles, 10 de febrero de 2010

Ma Framboise (midnight poem)

Cada vez que veo tus ojos
me pierdo en las promesas que
reflejan
sin importarme el saber que
jamás serán.

Cada vez que oigo tu voz
me ensordecen
tus fantasías de futuros compartidos,
aunque nunca se realicen.

Cada vez que tu piel me cubre
dejo que mi cuerpo se entumezca
ignorando que el frío me atormenta
cuando ya no está.

Cada vez que tu recuerdo me acompaña
comienzo a soñar que estamos enamorados
y que juntos la soledad apartamos
con dulces besos por la mañana.

Cada vez que recuerdo el aroma de tus senos
me pierdo en el color de tus ojos,
en la ternura de tu voz,
en la suavidad de tu piel
y lo increíble de tus promesas.

Cada vez que sé de ti
una sonrisa me ilumina el rostro
al pensar en lo que es,
lo que quiero que sea
y lo que nunca será.

Sonrío al saber que soy un secreto.
Tu secreto.

XRZ

martes, 2 de febrero de 2010

Incoeherencia

¿Será pues que deje de acordarme que no recuerdo que te iba a olvidar?

No puedo leer entre líneas lo que no está escrito y por tanto comprendo lo que te quiero decir.

Entonces saldré por unos momentos y diré que no te extraño para que veas lo mucho que me llegas a hacer falta.

Habré, para entonces, adquirido el conocimiento de la ignorancia que hace posible mi estupidez.

Correré por las nubes de manera tan grácil como lo hacen los peces muertos en la arena.

Morderé con tanta fuerza el aire que de mis dientes la sangre se evaporará subitamente formando cubos de hielo transparente.

Sólo entonces podré formular oraciones que beatificaran a la nada para hacerla mi nuyeva diosa y priotectora de la razón que comienza a escasear dentro de mi línea de pensamiento. Oraré con tanta devoción que nada de lo anterior pasará a menos que pase.

(El pensamiento no logra formular oraciones coherentes)

XRZ

jueves, 28 de enero de 2010

La boda de mis desilusiones y mis ensueños

"Todo comenzó con una explosión"
Monocordio.

Reviviendo lo poco que he logrado capturar entre las letras y de manera tan burda, me encontré contigo nuevamente, con una imagen de enamoramiento y ensoñación. Recordé la sonrisa que provocaste al verte, el nerviosismo al hablarte y el terror de que te perdiera de vista entre las arenas del tiempo. Viví otra vez entre tu mirada y tus labios, disfruté el sabor a gloria que tienen éstos.

Ahora las desilusiones pasan y saludan respetuosamente tu recuerdo. Ahora veo claramente la cobardía de mi cuerpo y lo insensato de mi pensamiento. Sobra decir lo que es evidente, que tu persona resultaba de una brillante y creciente belleza ante mis ojos y nunca negué, pero tampoco exclame certeramente; todo quedó entre sugestiones y versos que dejaban entrever la realidad de mi sentimiento.

Tu aroma me atrapó y tu mitificación causó el fin de una ilusión. De nuevo cometí los errores que dije no volvería acometer. De nuevo la soledad hizo que me alejara de la realidad y buscara consuelo en lo indeseable. Sin embargo tu recuerdo no deja de azotara a mi torpeza, el destino no deja de reírse de mi falta de valor. Estas en lo que busco y en lo que no deseo encontrar, estas en aquellas cosas que no me gustan y tambien en las que me deleitan. Estas en la ausencia de tu ser.

¿Cuándo sabré enfrentar a mi soledad? ¿Cuándo me atreveré a ver la realidad? ¿Cuándo sabré que es lo que realmente necesito? Y por sobre todas las cosas, la ignorancia y especulación son algo que no puedo dejar de vivir.

Espero aceptar, por beneficio propio, los extraños designios de mi imaginación como tales; efímeros. En algún momento tendré valor para dejar de escribirte y dejarte dentro de una antología de memorias, tal vez pueda convertirte en un personaje inolvidable y así pueda borrar lo que es por lo que quiero que sea. Separaré a la cereza de tí. Dejaré de soñarte y comenzaré a ver el brillo de tus ojos como el reflejo de la luz y no su origen. Esperaré que puedas leer lo que escribo y no sólo las palabras que te dedico.

Por otra parte tal vez pueda refugiarme en lo que desconoces de mí y aseverar que todo fué estricta literatura, que no puse nada de mi alma en cada una de las palabras que engendré, que no te llevas pedazos de mi vida y de mis ilusiones.

Eso haré, me refugiaré en la ausencia de tu ser...

pero tu recuerdo está en la ausencia de tu ser...

XRZ

martes, 26 de enero de 2010

Sueño

Tomaste mi mano y con un susurro dijiste: ¡Acompáñame! Azorado seguí el trayecto que marcaron tus pasos. Comenzamos a subir las escaleras acomodadas en espiral. No me soltabas, pareciera que un temor por mi caída lo impedía, el sudor comenzó en tu palma y se mudó a tu frente, no podía percibir la fatiga del recorrido, pues era inexistente y tu sudor provenía de un nerviosismo evidente.

no pude contener por mucho mi curiosidad y me detuve abruptamente en un descanso de la escalera, provocando que voltearas y me reprocharas con la mirada la súbita decisión y antes de que pudieras convertir en verbo la inconformidad que te causaba te silencié con un beso. Puedo decir ahora que tenías espectativas en un atrevimiento semejante y correspondiste a mis labios. Mientras yo cuestionaba mi suerte y buscaba una explicación que justificara el disfrutar el sabor de tus labios; por otra parte tú estabas en una línea de pensamiento muy distinta y distante a la mía. Rodeaste mi cuello con tus brazos con tal fuerza que por unos instantes el aliento me faltó.

Ví en tus ojos el brillo de la felicidad y la premunición de una gran tristeza. Continuamos nuestra marcha al final de las escaleras. Un temor comenzó a cobijar mi pensamiento de manera inexplicable,de repente aventurárme a lo desconocido mientras me sujetabas de la mano no resultó algo seguro. Abrí la boca para externar mi inquietud, pero uno de tus dedos selló mis labios al tiempo que abrías una puerta.

Inmediatamente te abalanzaste a mi pecho, me abrazaste, tal vez con la esperanza de encontrar en los latidos de mi corazón reconfortarte y tranquilizar; buscabas en mi temeroso palpitar un poco de valor. Me besaste.

Caminamos por un pasillo que se presentaba oscuro y ominoso sin hacer ruido alguno para que nuestra presencia no se hiciera evidente ante el silencio que habitaba el lugar. Nos detuvimos cerca del final de aquel pasillo y giramos a nuestra izquierda para quedar de frente ante una nueva puerta y entonces supe que esta vez me correspondía abrirla y penetrar en el misterio de lo que resultaba invisible para los dos. Te resguardaste en mi espalda, resultando ésta tu escudo. En cuanto la puerta reveló aquello desconocido al mundo de lo visible tu rostro se ocultó en mi nuca y dejaste escapar un sollozo que revelaba una dolorosa sorpresa.

(...)

sábado, 16 de enero de 2010

(Des) Oriente

Siempre he destacado lo caótico que resulta mi ciudad, y por lo mismo me resulta atrayente; sin embargo guardo un especial resentimiento en lo que se refiere a su zona oriente. Así como ud. lo oye, el oriente de la ciudad (pasando churubusco) me resulta una parte tan denesnable. Hay diferentes razones por las que puedo odiar esa parte de la ciudad, no niego que esos mismos factores existan en otro lado, pero al parecer en esa dirección todo no es de mi parecer.

No recordaba cuan desagradable me resultaban aquellos parajes abandonados hasta el día de ayer en que gracias a la depresión en la que me encuentro abordé uno de los camiones que, literalmente, rodean la ciudad. En un principio sólo apreciaba, desde mi ventanilla, las distintas calles por las que pasaba sin que tuvieran significado alguno. El trayecto resultaba fluido, sin contratiempos, ni tráfico; avanzábamos de acuerdo a la disposición del acelerador del conductor; que no era nada tímido.

Cual sería mi sorpresa que después de cruzar el eje central, a escasas cuatro cuadras, un ciudadano oriundo del oriente decidió rebasarnos. Obviamente sólo pudo colisionar en la parte frontal derecha del coloso móvil. Un letrero que dijera BIENVENIDO A ORIENTE hubiera resultado más apropiado, pero quién soy yo para cuestionar las tradiciones de la gente; si en el oriente resulta común recibir a los automovilistas con empellones de fibra de vidrio o aluminio (laminazos) no tengo escusa alguna para enjuiciar sus costumbres.

En fin la bienvenida resultó en un cambio de transporte, otro camión, y continuamos el trayecto. Cabe mencionar que todavía no concebía el hecho de estar en el oriente del D.F. Pero no paraba de quejarme acerca del tráfico, el sol que me pegaba directamente en la cara, el ruido de las bocinas de los automovilistas que lograban traspasar la barrera de sonido que implementaban unos audífonos y la música que se proyectaba directamente en mis oídos. En resumen se acumulaban las cosas que podrían molestar a cualquier persona.

Después de hora y media de estar esperando a que los conductures tuvieran una epifanía para que pudieran entender que si dejaba pasar de manera simultánea a los demás conductores, el estancamiento podría disolverse de manera paulatina, llegamos a la base del susodicho camión, al ser un circuito no había necesidad de bajarse pero el conductor creeyó prudente abandonar la unidad y ponerse a platicar con sus compañeros, de poder acompañarle lo habría hecho, el último trayecto resulto muy incómodo y hubiera disfrutado el desafanarme unos momentos de las incapacidades para maniobrar al volante de algunos"orates".

Después de largos minutos de espera, continuamos el trayecto y fué entonces que todos los recuerdos y resentimientos que estaban estancados en lo más recóndito de mi memoria comenzaron a desparramarse por la ventana.

La señal reveladora que detonó toda esa gama de recuerdos fué la cúpula de el palacio de los deportes y de cómo resulté caminando solo a mi casa después de un concierto muy placentero. Posteriormente llegamos a la delegación Iztacalco donde en algún momento tuve que regresar solo después de acompañarla, de igual forma en donde no pude obtener una plaza de trabajo por culpa de la insana afección que tuvo una expareja para retener mi identificación, recordé de igual forma que en algún momento me ví caminando bajo la lluvia con un ramo de rosas rumbo a mi casa. En otra ocasión por apostar a la aventura y decidirme ir a su casa y pedirle permiso a sus padres regresé solo, para no alterar la continuidad. Podría enlistar varios de los recuerdos que hacen del oriente un lugar non grato, no puedo sesgar los buenos recuerdos que de esa zona poseo pero en resumidas cuentas odio el oriente por aquellas experiencias desmoralizadoras que he tenido y en parte por sus respectivas causantes (enlistadas en orden ascendente):

-Ma Belle.

-Ma Framboise.

-Ma Noir Cerise.

XRZ
Powered By Blogger